Escitalopram: ¿Qué es? usos, precauciones y efectos secundarios
Actualizado el día 14 de agosto de 2024 por Alfredo Carpintero Angulo
La depresión y los trastornos de ansiedad son cada vez más comunes. Esto ha llevado al aumento en el uso de tratamientos antidepresivos por períodos largos con el objetivo de consolidar la respuesta a los fármacos y prevenir las posibles recaídas.
Como los problemas depresivos guardan estrecha relación con los bajos niveles de serotonina en el cerebro, medicamentos como el Escitalopram pueden ser muy efectivos para mejorar el equilibrio emocional.
Sin embargo, antes de aventurarse a usar el Escitalopram hay que conocer su mecanismo de acción, usos terapéuticos y efectos adversos.
¿Qué es el Escitalopram?
- Nombre comercial: Ver listaEzentius®; Epram®; Ipran®; Neuroipran®; Cipralex®; Heipram®; Lextor®; Meridian®; Lexapro®; Optiser®; EX3®
- Vida media: 27-32 horas
- Fórmula: C20H21FN2O
- Metabolismo: Hepatica (Desmetilado principalmente por CYP2C19)
- Biodisponibilidad: 80%
- Inf. de Licencia: EMA:enlace; FDA:enlace
- Peso mol.: 324,392 g/mol
El Escitalopram pertenece al grupo de los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina, llamados también fármacos antidepresivos.
Este medicamento actúa en el sistema serotoninérgico, aumentando la disponibilidad de la serotonina en el cerebro, neurotransmisor encargado de generar bienestar, motivación, energía y optimismo, y de esta forma contribuye al equilibrio mental.
Es un antidepresivo de acción rápida gracias a que tiene una mayor afinidad con las neuronas serotoninérgicas, facilitando no solo su producción, sino también su transporte.
Se considera uno de los psicofármacos más recetados para tratar los trastornos del estado de ánimo.
¿Para qué se emplea el Escitalopram?
Diversas investigaciones han demostrado que las propiedades antidepresivas y ansiolíticas del Escitalopram pueden utilizarse en el tratamiento del trastorno de ansiedad generalizada y la ansiedad social.
Un estudio publicado en la Revista de la Sociedad Española del Dolor concluyó que el “Escitalopram es un medicamento eficaz en el control de la depresión leve o moderada asociada al dolor crónico oncológico. Además, se puede concluir que al controlar el episodio depresivo hubo disminución estadísticamente significativa en la escala del dolor medido por la Escala Visual Analógica”.
Entre los usos terapéuticos que suelen darle los profesionales de la salud a este medicamento se encuentran los siguientes:
- Trastorno depresivo mayor. Puede aliviar síntomas como los sentimientos de inutilidad, abatimiento, pérdida de interés por las actividades diarias y pensamientos suicidas.
- Trastorno obsesivo compulsivo. Esta afección mental se caracteriza por temores irracionales y comportamiento repetitivo. El Escitalopram ha demostrado tener una respuesta adecuada en el control de estos síntomas.
- Trastorno de ansiedad generalizada. Se distingue porque la persona experimenta inquietud y ansiedad excesiva, acompañada de falta de energía, tensión muscular y problemas de concentración, por al menos seis meses. El Escitalopram induce una mejoría rápida en estos casos.
¿Cómo se administra el Escitalopram?
Este medicamento debe emplearse de acuerdo a las indicaciones de un profesional de la salud.
Las dosis que suelen recomendar los médicos a pacientes adultos son estas:
- Depresión. 10 mg tomados como dosis única al día, hasta un máximo de 20 mg al día.
- Trastorno de ansiedad social. Se recomiendan 10 mg como dosis única al día, puede disminuirse a 5 mg al día o aumentarse hasta un máximo de 20 mg al día.
- Trastorno obsesivo compulsivo. Se sugiere tomar 10 mg como dosis diaria, hasta un máximo de 20 mg al día.
- Trastorno de angustia. Se inicia con 5 mg al día durante la primera semana, antes de aumentar la dosis a 10 mg al día.
Los efectos del Escitalopram pueden sentirse a partir de dos semanas, aun así lo recomendable es continuar el tratamiento como mínimo 6 meses para prevenir la reaparición de los síntomas depresivos.
No se recomienda el empleo de este medicamento en niños y adolescentes menores de 18 años. Por otro lado, si se utiliza en formato de comprimidos debe tomarse con agua, y si es en solución oral debe medirse con el envase que viene para ese fin.
¿Qué debo evaluar antes de usar Escitalopram?
Entre las precauciones más importantes a tomar en cuenta antes de iniciar un tratamiento con Escitalopram están las siguientes:
- Interacciones. No puede emplearse en combinación con medicamentos para tratar la ansiedad, fármacos para tratar alteraciones del ritmo cardíaco, antidepresivos tricíclicos, neurolépticos, litio, triptófano, anticoagulantes orales, omeprazol, esomeprazol, fluvoxamina y cimetidina.
- Embarazo y lactancia. Solo debería administrarse a mujeres embarazadas bajo estricta vigilancia médica. Por otra parte, en la lactancia no es recomendable su uso debido a que puede ser excretado a través de la leche materna.
- Enfermedades. No se recomienda su uso en pacientes que padecen de epilepsia, diabetes, o que hayan experimentado un infarto cardíaco. En cuanto a personas que sufran de insuficiencia renal o hepática, deben consultar antes con un médico la conveniencia de su empleo y las dosis más apropiadas.
- Niños y adolescentes. No debe emplearse en niños y adolescentes menores de 18 años, esto porque se ha evidenciado que puede inducir comportamientos hostiles y suicidas
¿Qué efectos adversos produce el Escitalopram?
El sitio de conocimiento farmacológico Vademecum señala que entre los efectos adversos que puede ocasionar el Escitalopram se encuentran los siguientes:
- Náuseas.
- Diarrea.
- Estreñimiento.
- Vómitos.
- Mareos.
- Insomnio.
- Disminución o aumento del apetito.
- Somnolencia.
- Temblores.
- Trastornos de la eyaculación.
- Impotencia sexual.
- Ansiedad.
Por lo general, estos efectos son leves y desaparecen a las pocas semanas.
El Escitalopram pertenece a una generación de medicamentos dedicados a mejorar el estado de ánimo de personas deprimidas y sigue teniendo resultados muy positivos.
Bibliografía
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