Cefaclor: ¿Qué es? usos, precauciones y efectos secundarios

Actualizado el día 13 de marzo de 2024 por Alfredo Carpintero Angulo

Algunos medicamentos son muy eficaces para tratar infecciones en la piel. Sin embargo, pueden no tener ningún efecto contra la gripe causada por influenza o ante las infecciones virales. Eso es justo lo que sucede con el cefaclor. Analicemos un poco más que debemos saber sobre este medicamento.

En este artículo veremos qué es el cefaclor, sus usos, las precauciones importantes a considerar y los posibles efectos secundarios que genera. 

¿Qué es el cefaclor?

El cefaclor es un antibiótico de 2.ª  generación perteneciente al grupo de las cefalosporinas. Es indicado para el tratamiento de variadas infecciones causadas por bacterias. Su acción se enfoca en detener el crecimiento y propagación de las bacterias, evitando la síntesis de estos elementos en la pared celular y produciendo la muerte de los agentes nocivos.

Es relevante tomar en cuenta que los antibióticos se deben usar solo en caso de que la infección sea muy fuerte, y el cuerpo no pueda combatirla con sus propias defensas. Tomar esta clase de fármacos sin ser necesario hace que las bacterias que ingresan al cuerpo se vuelvan más resistentes.

¿Cómo se usa el cefaclor?

En España podemos encontrar cefaclor en presentaciones orales, bien sea en cápsulas, tabletas de liberación prolongada o suspensión. Deben tomarse por lo menos durante 7 días, a la misma hora. La dosis la debe sugerir un médico. Se recomienda seguir la receta y no alterar el orden de la administración recomendada por el doctor.

• Adultos. Las dosis pueden variar de 250 mg a 500 mg cada 8 horas, con un máximo de 4 g en un día. 
• Niños. Si el médico lo indica para un niño, la dosis puede ser de 20 mg por kg, cada 8 horas, con un máximo de 1 g al día.

Al emplear las presentaciones orales hay algunas cosas que se deben recordar. Veamos algunas de estas las recomendaciones.

• Comprimidos de acción prolongada. Se recomienda no partir, masticar ni triturar. Su función es que se disuelvan poco a poco y pueda tener una acción más prolongada. Las tabletas se toman generalmente 1 hora después de comer.
• Cápsula y suspensión. Se pueden tomar con o sin las comidas. Hay que agitar la suspensión antes de usar para integrar bien. Así se aprovechará todo su efecto.

Su nombre comercial es Ceclor y se utiliza para tratar las infecciones del tracto respiratorio inferior, amígdalas, garganta, nariz y oído. Además, también puede ser útil en el caso de la sinusitis, las infecciones en la piel y la fiebre reumática.

Si se sufre de problemas renales, es necesario consultar si es seguro tomar este medicamento y cuál sería la dosis apropiada para evitar complicaciones. Si se nota que después de un par de días no hay mejoría, o empeoran los malestares, se tiene que consultar al médico antes de suspender el tratamiento.

Precauciones al usar cefaclor

Analicemos cuáles son las precauciones que debemos de tomar en cuenta al usar este medicamento. Estas son especificadas por la Biblioteca Nacional de Medicina.

• Alergias. Se debe informar el médico tratante o al farmacéutico si se tienen alergias a los antibióticos de cefalosporina, antibióticos de penicilina o a cualquier otro fármaco. Se puede conseguir la lista de los componentes del cefaclor en la caja del producto.
• Otros medicamentos. Es importante saber si el cefaclor tiene interacción con otros medicamentos. Por eso, se debe informar al médico en caso de estar tomando vitaminas, suplementos a bases de hierbas, anticoagulantes, otros antibióticos y cualquier otro medicamento que se utilice o se piense emplear.
• Durante el embarazo. Hay que estar en contacto con el médico en el caso de una mujer con tratamiento de cefaclor esté embarazada, amamantando o quede embarazada durante el tratamiento.
• Problemas gastrointestinales graves. Se debe informar al médico en caso de sufrir de problemas gastrointestinales, sobre todo si se padece de colitis o enfermedades renales.

Informar a tiempo sobre los puntos anteriormente mencionados ayuda a evitar posibles complicaciones o reacciones desfavorables. Si se sufre una sobredosis, se pueden presentar vómitos, diarrea y crisis epiléptica. Los profesionales en la atención médica podrán realizar un lavado estomacal para extraer parte del medicamento y evitar su absorción. 

Es recomendable seguir las indicaciones del médico respecto a la dosis y duración del tratamiento. Cabe destacar que ingerir antibióticos de manera constante puede retraer las defensas naturales del cuerpo, lo que lo hace más propenso a contraer virus e infecciones y puede producir resistencia a los medicamentos.

Efectos secundarios del cefaclor

Es necesario conocer los posibles efectos secundarios de un medicamento para no alarmarse en el caso de presentar alguno de ellos. Los efectos secundarios comunes, que no representan un riesgo muy alto, son los siguientes: diarrea, náuseas y vómitos, dolor de cabeza, dolor de estómago y picazón en la zona de los genitales.

Algunos efectos secundarios se podrían complicar y llegar a ser graves. Veamos los efectos secundarios que hay que atender cuanto antes.

• Alergia. Incluye sarpullido, picazón y sensación de escozor. En caso de empeorar, podría llegar a presentar dificultad para tragar, hablar o respirar, así como inflamación del rostro, garganta, lengua, ojos, manos o piernas.
• Debilidad. Se siente una sensación elevada de debilidad y se puede sufrir de un desmayo.
• Dolor. Este ocurre sobre todo en las articulaciones.
• Sangre en las heces. La defecación puede ser muy líquida o estar acompañada con sangre.

Toso estos síntomas son urgentes y deben atenderse cuanto antes. Si después de terminado el tratamiento vuelve la fiebre, dolor de garganta y otros malestares, signos de una infección, se debe consultar al médico.

El cefaclor puede producir otros efectos secundarios que no están incluidos en esta lista. Se recomienda consultar con el médico en caso de cualquier anomalía.

Bibliografía

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• FICHA TECNICA CECLOR 500 mg CAPSULAS DURAS. Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios. https://cima.aemps.es/cima/dochtml/ft/55186/FT_55186.html