Estreñimiento: Síntomas, diagnóstico y tratamiento

Actualizado el día 13 de marzo de 2024 por Alfredo Carpintero Angulo

La Biblioteca Nacional de Medicina afirma que todos hemos padecido estreñimiento ocasional alguna vez. Pero, cuando este trastorno se vuelve crónico, empiezan a aparecer síntomas que dificultan a la persona realizar bien sus labores del día. Este problema aparece sobre todo en adultos y suele ser doloroso.

En este artículo estaremos hablando más sobre el estreñimiento, sus síntomas, el diagnóstico y el tratamiento más recomendado para cada caso.

¿Qué es el estreñimiento?

El estreñimiento es la dificultad para evacuar las heces fecales. Por lo general, ocurre que estas se tornan duras y secas, y no fluyen adecuadamente por el intestino. Se denomina estreñimiento crónico cuando una persona tiene deposiciones dos o tres veces en una semana, lo que hace que las heces se acumulen por un par de días, obstruyendo aún más el intestino.

Una persona con estreñimiento puede ejercer fuerza para tratar de evacuar, esto suele ser doloroso y hasta peligroso, en algunos casos. El estreñimiento no tiene una causa específica, pero sí hay factores que se deben evitar para empeorar el problema. Lo bueno es que hay muchos tratamientos disponibles para evitar, o disminuir, las molestias causadas por este problema.

Síntomas del estreñimiento

Los síntomas son bastante característicos, por lo que es fácil asociarlos con el estreñimiento. Veamos cuáles son los síntomas más comunes.

• Evacuaciones esporádicas. Apenas dos o tres veces en una semana.
• Heces duras y secas. Esto dificulta aún más desecharlas.
• Ejercer fuerza para defecar. Esto puede causar daños a nivel físico.
• Presión. Se tiene la sensación de una obstrucción en el recto o del colon presionado o lleno, aun después de ir al baño.

Existen algunos síntomas que dejan señales claras de alarma. Se recomienda consultar a un médico si se presentan algunos de los siguientes síntomas. 

• Malestares estomacales. Incluyen vómitos, inflamación en el abdomen o rigidez en esta zona.
• Pérdida de peso. Es notoria la pérdida, la cual puede ocurrir en un espacio de tiempo corto.
• Alteraciones en las evacuaciones. Estas pueden ser con sangre. Y, en otros casos, se puede pasar hasta una semana sin poder defecar ni una vez.

Hay quienes recurren a medicamentos laxantes o enemas para ayudar al intestino, sin embargo, una deposición no va a desaparecer todos los síntomas del estreñimiento crónico. Además, este padecimiento puede continuar por meses o incluso años, por lo que es mejor que un médico haga seguimiento y, de esa manera, conseguir el mejor tratamiento.

¿Cómo se diagnostica el estreñimiento?

El médico realiza un análisis del historial médico del paciente y una evaluación física. En algunas ocasiones, esto es suficiente para identificar la causa. Puede ser originado por medicamentos o masas, por lo que no es necesario proceder con otros análisis. El diagnóstico es importante para dar con el origen del problema y tratarlo directamente.

Cuando el tratamiento no tiene el efecto esperado, o si con la exploración física no se encontró la causa, el médico puede sugerir un análisis de sangre, una radiografía abdominal o una tomografía computarizada. Con estos exámenes se puede ver si la persona sufre de hipotiroidismo, problemas en los niveles de calcio o si hay alguna obstrucción intestinal.

Otro procedimiento a seguir puede ser el estudio interno de los intestinos y el funcionamiento del músculo esfínter anal. Entre las evaluaciones que se pueden efectuar encontramos, Sigmoidoscopia, colonoscopia, manometría anorrectal, etc.

Estos exámenes muestran el funcionamiento del intestino, colon y recto, permitiendo determinar si el problema tiene una causa subyacente. Al conocer el origen del problema, es más sencillo indicar un tratamiento eficiente.

Causas del estreñimiento 

La causa del estreñimiento suele ser la lentitud del tránsito de las heces fecales por el intestino. Una obstrucción también puede impedir que las heces sean expulsadas, por lo que estas se endurecen y acumulan. Otras causas pueden estar relacionadas con problemas neurológicos y hormonales.

Dentro de las causas más comunes, la Biblioteca Nacional de Medicina señala deshidratación, obstrucción o constricción intestinal, cáncer en el abdomen, colon o recto, embarazo y muchas otras.

Es importante encontrar la causa del estreñimiento y tener un tratamiento que mejore los síntomas. Sobre todo, porque el estreñimiento crónico, con el tiempo puede presentar otras complicaciones. El esfuerzo que se realiza para intentar defecar cuando las heces son duras puede causar hemorroides, prolapso rectal, retención fecal y rupturas en las paredes del ano.

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Tratamiento para el estreñimiento

El tratamiento para el estreñimiento dependerá del origen del problema y de la gravedad del mismo. Generalmente, se centra en tres etapas.

Primera etapa

La primera involucra una dieta saludable y cambios en el estilo de vida. La dieta y el ejercicio influyen mucho en el tránsito intestinal. Lo recomendable es seguir una dieta rica en fibra. Se debe consumir de 15 a 20 g de fibra diarios. Esta se consigue en verduras, frutas y salvado. Para que el tratamiento tenga un efecto rápido, debe ir acompañado del consumo de abundante agua.

También es importante dedicar tiempo a una evacuación calmada, preferiblemente de 15 a 45 minutos después del desayuno, ya que la comida activa el tránsito intestinal.

Segunda etapa

Para la segunda etapa se pueden utilizar laxantes. Los suplementos de fibra, estimulantes, lubricantes, ablandadores de heces, enemas y supositorios, funcionan de manera excelente para facilitar la defecación. Es fundamental tener en cuenta que no todos los pacientes pueden tomar laxantes, de allí la importancia de primero realizar un diagnóstico seguro. 

Si el paciente tiene otros problemas intestinales, los laxantes pueden empeorar el caso. Estos pueden ser de uso prolongado o para eventualidades. Hay que saber diferenciarlos y usarlos bien.

Tercera etapa

La última opción suele ser la cirugía. Para quienes el estreñimiento se debe a obstrucción o constricción, la cual no mejora con un tratamiento de los mencionados, la cirugía puede ser necesaria. Esta consta de la extirpación quirúrgica de parte del colon si el movimiento de las heces fecales por el intestino es demasiado lento. Rara vez es necesaria la extracción de todo el colon.

La mejor recomendación para los pacientes con estreñimientos es que tomen en cuenta las sugerencias antes señaladas, para saber cómo actuar y conseguir el alivio que tanto necesitan.

Bibliografía

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