Todo Sobre La Dieta Blanda: Tipos, Alimentos, Menús Y Consejos - Farmacia Angulo
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Todo sobre la Dieta Blanda: Tipos, Alimentos, Menús y Consejos

Actualizado el día 13 de diciembre de 2023 por Alfredo Carpintero Angulo

La dieta blanda es una de las dietas terapéuticas más recomendadas por los profesionales de la salud. Su popularidad está asociada a su efectividad y a la sencillez de sus pautas.

Muchos médicos encuentran en esta dieta de protección gástrica una de las medidas más eficaces para combatir los malestares digestivos.

Ahora bien, puesto que el término dieta blanda puede generar confusión, es propicio aclarar en qué consiste, sus ventajas y algunas recomendaciones sobre su empleo.

¿En qué consiste la dieta blanda?

La dieta blanda es un plan de alimentación de duración variable que se prescribe ante distintas enfermedades del aparato digestivo o para la recuperación de una intervención quirúrgica

Su nombre no debe interpretarse de manera literal, pensando que incluye sólo alimentos líquidos y no sólidos. Más bien, su característica fundamental es que incluye alimentos de fácil masticación y digestión, libres de condimentos, grasas, ácidos u otras sustancias que causen irritación en el aparato digestivo.

¿Para qué se recomienda la dieta blanda?

Por lo general, suele recomendarse cuando el sistema digestivo necesita recuperarse después de pasar una enfermedad. Normalmente, se la relaciona al proceso de recuperación luego de experimentar infecciones intestinales como la gastroenteritis, episodios de diarrea y/o vómitos o intoxicaciones alimentarias. 

El objetivo en estos casos es brindarle protección gástrica al estómago, darle poco trabajo e intentar detener las constantes deposiciones.

No obstante, también es común que se indique en procesos posoperatorios, cuando hay que someterse a una colonoscopia, en casos de inflamación de garganta, esófago o problemas en dientes y encías 

Por supuesto, la dieta blanda no es única, sino que varía en función de la situación clínica del paciente. Así que, por citar un ejemplo, una persona sometida a una cirugía maxilofacial deberá mantener una dieta basada en líquidos y purés, mientras que en otras situaciones se incluirán otros tipos de alimentos.

Tipos de dieta blanda

Este plan de alimentación se emplea en diversas enfermedades y según sea la aplicación se clasifica en:

  • Astringente. Se le llama dieta de protección gástrica y está destinada a disminuir los malestares intestinales como dolor de estómago, diarrea, náuseas y vómitos, usualmente maneja una dieta de textura blanda.
  • No astringente. Empleada en el proceso de sanación de afecciones odontológicas y de la garganta, inflamación esofágica y dificultades para tragar, proporcionando al paciente alimentos fáciles de masticar e ingerir. La comida recomendada puede ser líquida, semilíquida o blanda. 
  • Específicas. Indicada en casos de pacientes que serán sometidos a intervenciones quirúrgicas o que requieren exámenes médicos como la colonoscopia. Puede contener alimentos líquidos, semi líquidos o blandos, dependiendo de las circunstancias particulares de cada persona.

¿Qué alimentos incluye la dieta blanda?

En sentido general, los alimentos permitidos en la dieta blanda son estos:

  • Arroz blanco hervido.
  • Pollo y pavo cocido, a la plancha o al horno y sin condimentar.
  • Pescado blanco como la merluza, bacalao y lenguado cocinado al vapor, hervido, al horno o a la plancha.
  • Verduras cocidas o en cremas, como las zanahorias, patatas, calabazas y calabacín.
  • Tortilla francesa.
  • Legumbres. Para personas vegetarianas y veganas solo legumbres peladas como las lentejas rojas, lentejas sin piel y los guisantes pelados, cocidos y triturados en puré.
  • Pan tostado, para hacerlo más digerible.
  • Manzana rallada y algo oscurecida, para potenciar sus atributos astringentes.
  • Compotas de manzana y pera.

Alimentos prohibidos en cualquier dieta blanda

Los alimentos de difícil digestión no se incluyen en la dieta blanda, tal es el caso de: 

  • Frutos secos.
  • Bollería.
  • Alimentos flatulentos como las coles y algunas legumbres.
  • Alimentos ácidos como el tomate y las frutas cítricas.
  • Café y té.
  • Bebidas gaseosas o carbonatadas.
  • Picantes.
  • Dulces.
  • Vinagre.
  • Alcohol.
  • Salsas.
  • Alimentos grasos, entre ellos las frituras.

Después de experimentar alguna enfermedad digestiva que tanto debilita el organismo, puede que la idea de someterse a una dieta suponga un panorama triste y desmotivador. Pero no tiene porqué ser así.

A continuación, se presentan algunos menús estandarizados adaptados a este tipo de régimen alimenticio, los cuales se pueden configurar, con la ayuda de un profesional sanitario, a los gustos y necesidades.

Ejemplo de menú de dieta blanda astringente

Este tipo de dieta blanda admite alimentos como arroz blanco hervido, patatas hervidas o al vapor, verdura cocida como las zanahorias, calabazas o calabacines, tortillas francesas, carnes magras; como el pollo, el pavo o el conejo, hervidas, a la plancha o al horno; pescados hervidos, a la plancha o al horno, compotas de manzana o pera y gelatina.

Un modelo de este tipo de dieta es el siguiente:

  • Desayuno. Tostada de pan blanco, loncha de pechuga de pavo, yogur e infusión digestiva.
  • Media mañana. Manzana en compota o cocida 5 minutos al microondas.
  • Comida. Arroz blanco, pescado blanco hervido o plancha y manzana rallada.
  • Merienda. Manzana rallada e infusión digestiva.
  • Cena. Crema de verduras (zanahoria, calabaza o calabacín) y tortilla francesa y yogur.

Ejemplo de menú de dieta blanda astringente

Esta dieta que no incluye alimentos sólidos que tengan que masticarse mucho, puede hacerse de esta manera: 

  • Desayuno. Arroz u otro cereal cocido en leche y triturado con la suficiente leche para que quede muy líquido y una infusión.
  • Media mañana y media tarde. Compota de manzana o batido de frutas casero sin azúcar y una infusión.
  • Comida y cena. Crema simple de verduras con pollo o pescado triturados. Yogur líquido o kéfir.
  • Durante todo el día. Caldo de verduras o de pollo.

Consejos y recomendaciones acerca de la dieta blanda

Con la ayuda experta de un médico se puede establecer el tiempo requerido para la dieta blanda, que suele ser de corta duración, después de lo cual, los alimentos sólidos se introducirán gradualmente, observando la tolerancia y respuesta del organismo.

Entre las recomendaciones para beneficiarse de este plan alimenticio se pueden señalar:

  • Masticar a conciencia los alimentos. Antes de ingerir, cada bocado debe ser bien triturado. Por otro lado, la saliva contiene enzimas que contribuyen al proceso de la digestión.
  • Tomar la comida tibia. No ingerir comida caliente ni fría, con la finalidad de que el estómago funcione mejor.
  • Hidratarse bien. Es importante beber agua a pequeños sorbos o en infusiones que favorecen la digestión, como la manzanilla o el poleo.
  • Comer en pequeñas cantidades. La idea no es llenar el estómago de una sola vez, sino hacer comidas más frecuentes, y al mismo tiempo evitar pasar muchas horas sin ingerir alimentos sólidos, salvo en una primera fase muy estricta.
  • Cocinar con poca sal y pocas especias. En todo caso se pueden emplear hierbas que ayudan a la digestión, como el orégano.

Tratar con consideración al sistema digestivo cuando se resiente por alguna enfermedad es prioritario. Sin duda, con una dieta blanda supervisada por un médico se puede alcanzar este objetivo.

Lo ideal es seguir la recomendación personalizada del especialista médico o diplomado en nutrición.

Dieta blanda ejemplos

La dieta blanda es una forma de alimentación recomendada para personas con problemas digestivos o que se están recuperando de alguna cirugía. En general, se caracteriza por incluir alimentos de fácil masticación y digestión. Ejemplos de estos alimentos son el pollo y el pescado cocidos, los huevos, el yogur, las frutas y verduras cocidas, y los cereales integrales.

Un ejemplo de menú para un día en la dieta blanda podría ser: Para el desayuno, una taza de té con leche desnatada y una tostada de pan blanco con mermelada; para el almuerzo, una porción de pollo cocido con verduras al vapor y una manzana asada para el postre; y para la cena, un filete de pescado al horno con puré de patatas y un yogur natural de postre.

Es importante recordar que, aunque se llame «dieta blanda», esto no significa que los alimentos deban ser insípidos. Puedes utilizar hierbas y especias para mejorar el sabor de los platos, siempre y cuando no sean picantes, ya que estos podrían irritar el estómago. Ejemplos de aderezos permitidos son el orégano, el tomillo y el laurel.

Además de los alimentos mencionados, en la dieta blanda también están permitidas las infusiones, los zumos naturales y el agua. La hidratación es fundamental para el buen funcionamiento del organismo, por lo que se recomienda beber al menos 2 litros de líquidos al día. Sin embargo, es mejor evitar las bebidas con gas y el alcohol, ya que pueden generar gases e inflamación.

Finalmente, es importante recordar que la dieta blanda es una medida temporal y no debe seguirse a largo plazo sin la supervisión de un profesional de la salud. Aunque proporciona los nutrientes necesarios para la recuperación, puede ser baja en fibra y otros nutrientes esenciales, por lo que una vez que la condición mejore, se debe volver a una dieta más balanceada.

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Farmacéutico. Número de colegiado: 1687. Mi formación académica incluye una Licenciatura en Farmacia, y estoy colegiado por el colegio Oficial de Farmacéuticos de Toledo, en colaboración con la Consejería de Sanidad de Castilla-La Mancha. Además, amplié mis competencias con una Diplomatura en Nutrición Humana y Dietética. Poseo calificación profesional como técnico ortopédico y me he especializado en el campo de la nutrición aplicada al deporte.