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Tensión Arterial: Todo lo que Necesitas Saber

Actualizado el día 22 de mayo de 2023 por Alfredo Carpintero Angulo

La tensión arterial cumple una función básica en la circulación sanguínea. De hecho, se le conoce como presión sanguínea arterial, porque ejerce presión como si se tratara de una fuerza, para que los tejidos del organismo reciban los nutrientes y el oxígeno.

Ahora bien, en ocasiones la tensión arterial está alta o baja, ¿cuáles son los tipos de tensión?, ¿cuándo es necesario acudir a un especialista?, y por supuesto, ¿qué tratamientos se deben seguir para nivelar la tensión? En este artículo responderemos estas y otras preguntas.

¿Qué es la tensión arterial?

La tensión arterial es el motor o fuerza que permite que la sangre llegue a las paredes de las arterias. Cabe destacar que, aunque el corazón es el órgano encargado de bombear la sangre al organismo, la presión arterial es la que establece la “velocidad con que viaja por todo el cuerpo”.

El especialista en Nefrología, Julián Segura, utilizó una analogía bastante interesante para entender la importancia de que la tensión arterial sea la adecuada. 

Asemeja al sistema circulatorio con el servicio de fontanería de una edificación: “Es un sistema de tuberías por las que circula un fluido y la presión a la que circula tiene que ser el adecuado. Si la presión aumenta por encima de unos niveles, las arterias que conducen la sangre empiezan a sufrir un daño mayor y, a la larga, ese daño se acaba traduciendo en complicaciones”.

La hipertensión es un problema que pueden padecer tanto los pacientes de edad avanzada como jóvenes, de allí la importancia de conocer los niveles adecuados y cómo mantenerlos en el rango correcto.

Tipos de tensión arterial

La tensión arterial se divide en 2, es decir, tensión sistólica o alta, y la tensión diastólica o baja. Ahora bien, dentro de cada una resalta la siguiente clasificación:

  • Tensión arterial normal. Al medir la presión arterial debe arrojar 120/80 mm Hg. Estos son los datos que se clasifican en tensión normal.
  • Tensión baja. La hipotensión; como también se le conoce, se da cuando hay una caída de unos 20 mm de mercurio.
  • Presión alta. La hipertensión es uno de los problemas más habituales en los adultos mayores, debido al endurecimiento de las paredes arteriales. Se da cuando el valor es superior a 120 a 129 mm Hg.
  • Pre hipertensión. Esta nueva clasificación se desarrolla cuando el paciente apenas está enfrentando los síntomas de una presión arterial, bien sea alta o baja. En general, la tensión arterial se encuentra entre 130/80 y 140/90 mm de mercurio. Es el momento adecuado para tomar medidas y evitar un problema de salud grave a largo plazo.

Es importante destacar que existen situaciones específicas que pueden alterar los valores. Esto no significa que el paciente sufra de un problema de tensión alta o baja. De hecho, durante el día es posible que los valores cambien ligeramente.

¿Qué tensión es peligrosa?

La tensión muy alta o muy baja son peligrosas. La crisis de hipertensión muy alta requiere de atención médica de inmediato. Cuando el valor es mayo rde 130-139 mmHg (diástole) debemos vigilar.

Por otra parte, la tensión baja genera preocupación cuando está en 80 y 89 mmHg.

Cuando la presión es superior a 180/120 mm Hg se debe llamar a urgencias. Generalmente, se presentan síntomas graves asociados como dolor en el pecho, debilidad, visión borrosa.

Si la tensión es alta, y no se padecen síntomas asociados, se recomienda esperar unos minutos y volver a tomar la tensión. De este modo, se puede verificar si los datos son correctos. En caso de serlo, el paciente necesitará atención médica de urgencia.

Cabe destacar que, hay ciertos pacientes con patologías como la diabetes en el que los valores son altos si las cifras rebasan los 140/85 mmHg.

¿Cómo prevenir problemas con la tensión?

La tensión arterial requiere de un ritmo adecuado, ni muy bajo ni muy alto. Para evitar problemas de salud, es necesario llevar hábitos saludables.

  • Evitar el consumo de alimentos ultraprocesados e implementar una dieta más natural rica en verduras, pescado, entre otros.
  • Reducir el consumo de carne.
  • Evitar el sedentarismo y practicar ejercicios al menos una hora al día.
  • No fumar.
  • Evitar el consumo excesivo de bebidas alcohólicas.
  • Reducir el consumo de sal.

Preguntas frecuentes sobre la tensión arterial

Algunas personas no saben cómo reaccionar ante una subida o bajada de tensión. Además, algunos pacientes no saben qué deben hacer para prevenir la presión arterial. A continuación, responderemos las preguntas más frecuentes respecto a la hipertensión o hipotensión.

¿Por qué tengo que preocuparme por la presión arterial alta?

La presión alta puede causar problemas de salud serios que incluso pueden afectar la vida. La tensión alta hace que el corazón trabaje con esfuerzo, pues bombea sangre con más fuerza. Esto puede llevar a experimentar un ataque cardíaco, insuficiencia renal, ataque cerebral (ACV), entre otros.

¿Cuáles son los tratamientos para la presión arterial alta?

Los pacientes hipertensos deben tener el diagnóstico de un especialista. Para ello debe tomarse la tensión en citas periódicas. En caso de sufrir de hipertensión debe mantener un peso ideal o saludable. 

Evitar malos hábitos como fumar o tomar alcohol en exceso, hacer algo de ejercicios y reducir el consumo de sodio. Es posible que el médico de cabecera recete algunos medicamentos que generalmente se deben seguir de por vida.

¿Cuándo es conveniente medir la tensión?

La medición de la tensión debe hacerse al menos una vez al año, cuando se trata de pacientes que no están en riesgo, como por ejemplo en adultos jóvenes.

Claro, no es preciso hacer un examen especializado. Al acudir a cualquier consulta médica se puede tomar la tensión. Si sigue una relación de estos valores se puede diagnosticar la hipertensión, hipotensión o el riesgo de padecerlo. Hay tensiómetro que se pueden utilizar en casa como el TENSIÓMETRO APOSAN DE BRAZO.

¿Cómo bajar presión alta al instante?

No hay una forma de bajar la tensión alta; especialmente cuando se trata de una presión superior a 180/120 mm Hg, pues esta requiere de atención inmediata por las consecuencias que puede derivar.

No obstante, si en casa se tiene la costumbre de medir la tensión y el paciente se ha dado cuenta de que sus niveles se están elevando, se recomienda mejorar los hábitos alimenticios como reducir la comida grasa e incluir verduras, reducir el estrés y bajar el consumo de sustancias perjudiciales como el tabaquismo o bebidas alcohólicas. Si después de seguir estos hábitos no es posible controlar la tensión alta, tenemos que acudir al médico para un diagnóstico.

¿Cómo medir la tensión arterial?

En general, en las consultas el especialista es quien mide la tensión. No obstante, el médico puede recomendar que el paciente lo haga en casa. De esta forma se arrojan datos certeros, pues en casa hay un ambiente más relajado.

El fenómeno “bata blanca” es cuando se afecta la tensión arterial frente al especialista. Por lo tanto, es mucho mejor contar con un esfigmomanómetro o tensiómetro. Hay monitores de diseño intuitivo y un precio asequible.

  • Esfigmomanómetro de mercurio. Esta herramienta la utilizan los profesionales, se usa junto a un fonendoscopio.
  • Aparato electrónico. Cuenta con detector de pulso y es muy fácil de usar en casa. Es muy sensible, así que el paciente no debe hablar mientras se mide la presión.
  • Esfigmomanómetro de aire. Es uno de los más populares, se necesita un fonendo para usarlo.

En conclusión, la presión arterial es una patología que en muchas ocasiones no presenta síntomas. No obstante, es de vital importancia seguir una medición regular; especialmente si se tiene por encima de 40 años de edad o hay incidencias familiares.

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Farmacéutico. Número de colegiado: 1687. Mi formación académica incluye una Licenciatura en Farmacia, y estoy colegiado por el colegio Oficial de Farmacéuticos de Toledo, en colaboración con la Consejería de Sanidad de Castilla-La Mancha. Además, amplié mis competencias con una Diplomatura en Nutrición Humana y Dietética. Poseo calificación profesional como técnico ortopédico y me he especializado en el campo de la nutrición aplicada al deporte.