Losartan: ¿Qué es y para qué sirve?

Actualizado el día 12 de enero de 2024 por Alfredo Carpintero Angulo

El losartán se ha convertido en uno de los medicamentos más recomendados para tratar la hipertensión o la presión arterial alta. Su uso en la prevención de accidentes cerebrovasculares es también muy conocido.

Millones de personas por todo el mundo dependen de este medicamento para poder desarrollar sus actividades diarias y tener mejor calidad de vida.

No obstante, es preciso conocer exactamente cómo funciona este fármaco y sus efectos adversos, puesto que solo de esta manera podremos observar sus beneficios y evitar las consecuencias de no usarlo correctamente.

¿Qué es el losartan?

• Fórmula: C₂₂H₂₃ClN₆O
• Número CAS: 114798-26-4
• Nombre comercial: Cozaar
• Vida media: 1,5-2 horas
• Metabolismo: Hepático (CYP2C9, CYP3A4)
• Biodisponibilidad: 25–35%
• DrugBank: DB00678

Losartán forma parte de la familia de medicamentos denominados antagonistas de los receptores de la angiotensina II, una sustancia producida en el organismo que se une a unos receptores presentes en los vasos sanguíneos, provocando que estos se estrechen y aumente la presión arterial.

Contribuye a evitar el empeoramiento de la función renal en pacientes con presión arterial alta y con diabetes tipo II. Además de ser un medicamento antihipertensivo, se indica como parte del tratamiento de la insuficiencia cardíaca.

Mecanismo de acción del losartán

Generalmente, el 75% de los pacientes hipertensos presentan niveles de angiotensina II por encima de los valores necesarios para mantener una presión arterial normal.

El losartán actúa impidiendo la acción de la hormona angiotensina II, que es una de las responsables del control de la presión arterial.  

Al no permitir la unión de la angiotensina II a los receptores de los vasos sanguíneos, el losartán produce la relajación de la musculatura de los vasos sanguíneos, con lo que se logra una disminución de la presión arterial y al mismo tiempo un aumento en la cantidad de sangre y oxígeno que llega al corazón.

¿Qué usos se dan al losartán?

La presión arterial alta es una condición común, y cuando no se trata apropiadamente, puede ser la causante de severas afecciones cerebrales, cardíacas y renales, que pueden causar la muerte.

El losartán es prescrito por un médico cuando comprende que la inhibición de la angiotensina II puede traer ventajas terapéuticas al paciente, en cuadros clínicos como estos:

• Hipertensión arterial. Solo o en combinación con otros medicamentos, el losartán se emplea en el tratamiento de la presión arterial alta. 
• Disminución del riesgo de accidente cardiovascular. Se usa para reducir el riesgo de accidente cerebrovascular en personas que tienen presión arterial alta y una hipertrofia ventricular izquierda, es decir, el agrandamiento de las paredes del lado izquierdo del corazón, así como para prevenir embolias cerebrales e infartos al corazón en estos pacientes. 
• Problemas renales. Este medicamento se utiliza para tratar la enfermedad del riñón en personas que tienen diabetes tipo II y presión arterial alta. También para proteger el riñón en pacientes hipertensos con diabetes tipo II, que presentan insuficiencia renal y proteinuria ≥ 0,5 g al día.

¿Cómo se administra el losartan?

En el campo farmacéutico se comercializan los comprimidos de losartán. La dosis adecuada de este medicamento varía en función de la necesidad de cada paciente. 

Hay que subrayar que no debe emplearse este fármaco si no ha sido indicado por un médico o un farmacéutico.

Las dosis usualmente recomendadas en adultos y adolescentes son las siguientes:

• Tratamiento de la hipertensión. Dosis inicial de 50 mg al día, con dosis máxima de 100 mg cada día.
• Tratamiento de la insuficiencia cardíaca. Dosis inicial de 12,5 mg al día y una dosis de mantenimiento de 50 mg al día.
• Nefropatía diabética. Dosis inicial de 50 mg al día, con un máximo de 100 mg al día.
• Prevención de ictus. Dosis inicial de 50 mg al día, con un máximo de 100 mg al día.

El losartán puede tomarse con o sin alimentos. Ahora bien, con el fin de evitar el riesgo de hipotensión brusca, se recomienda iniciar el tratamiento con la dosis más baja, y hacerlo en horario nocturno, sobre todo en los pacientes de avanzada edad.

Precauciones al usar losartan

El empleo de losartán afecta directamente la presión arterial, por lo que sin las debidas precauciones y administrándose sin asistencia médica, puede ocasionar problemas graves. 

Se recomienda su uso preferiblemente en personas menores de 55 años, y ya que causa una mayor excreción de ácido úrico, puede ser favorable para personas que padezcan gota.

Conviene recordar también que, debido a que el alcohol puede provocar una disminución de la presión arterial, no debe consumirse en combinación con este medicamento.

Contraindicaciones e interacciones del losartan

El losartán está contraindicado en estos casos: 

• Personas con estenosis bilateral de arteria renal.
• Pacientes con niveles sanguíneos de potasio elevados o con empeoramiento agudo de la función renal.
• En el embarazo, debido al alto riesgo de malformaciones fetales y complicaciones obstétricas.
• No debe ser administrado durante la lactancia.

Con relación a las interacciones, debe evitarse la administración conjunta de losartán con los siguientes medicamentos:

• Alisquireno. Aumenta el riesgo de hiperpotasemia e hipotensión.
• Antiinflamatorios. Puede sufrirse de hiperpotasemia, hipotensión y lesión renal aguda.
• Litio. Aumenta la toxicidad por litio.
• Fluconazol. Reduce la eficacia del losartán.
• Espironolactona. Existe mayor riesgo de hipercalemia.

Efectos secundarios del losartan

Aunque es un fármaco seguro, como cualquier medicamento antihipertensivo puede producir hipotensión arterial, lo que sucede en aproximadamente el 5% de los pacientes que lo utilizan.

Estos síntomas de la hipotensión se manifiestan a través de mareos, debilidad y oscurecimiento repentino de la visión. Esta posibilidad se incrementa cuando la dosis inicial de losartán es demasiado alta, cuando los pacientes son mayores de 60 años, sufren de deshidratación, insuficiencia cardíaca o están empleando diuréticos.

Aparte de esto, el losartán puede provocar efectos secundarios, tales como:

• Dolor en las piernas, en la rodilla o en la espalda
• Debilidad o calambres musculares
• Diarrea
• Acidez estomacal
• Menor sensibilidad al tacto

Con el losartán se controlan millones de personas que sufren de hipertensión. Sin embargo, el uso de este medicamento conlleva riesgos que pueden evitarse si el paciente se ciñe estrictamente a las instrucciones médicas.