Cefalea: Síntomas, diagnóstico y tratamiento 

Actualizado el día 13 de marzo de 2024 por Alfredo Carpintero Angulo

La cefalea, mejor conocida como dolor de cabeza, afecta al 50% de la población mundial. Además, el 30% sufre de migraña. Este padecimiento puede que parezca algo común y de poca importancia, pero si se vuelve crónico puede ser el indicativo de una patología mucho más grave. ¿Cómo identificar los distintos tipos de cefaleas?

En este artículo hablaremos de la cefalea. ¿Qué es? ¿Cuáles son sus síntomas? ¿Cuál es el tratamiento correcto según su origen? Veamos.

¿Qué es la cefalea?

La cefalea hace referencia a cualquier tipo de dolor en la cabeza, sin limitar su ubicación. Cabe destacar que el cerebro no duele. Sin embargo, a este lo cubren unas membranas con terminaciones nerviosas que sí reflejan dolor. Las meninges envían mensajes al tálamo, el cual se encuentra conectado con las zonas del cerebro que manejan el dolor y las emociones.

El cerebro es una de las partes más complejas del cuerpo, pues a este se conecta todo el organismo. Por ello, puede enviar mensajes de dolor a cualquier parte del mismo. De igual manera, afecciones de diferentes partes del cuerpo pueden provocar dolores de cabeza. Las cefaleas son uno de los trastornos más comunes del sistema nervioso, según la OMS. 

¿Cuáles son las causas más comunes de la cefalea?

Las cefaleas pueden ser causadas por una amplia variedad de factores. Los más comunes incluyen estrés, fatiga, falta de sueño, deshidratación, hambre, ciertos alimentos y bebidas, y uso excesivo de medicamentos para el dolor de cabeza. Las cefaleas también pueden ser causadas por condiciones de salud subyacentes, como trastornos del sueño, trastornos del sistema nervioso, o presión arterial alta. Además, algunos tipos de cefaleas pueden ser desencadenados por ciertas actividades físicas o posturas.

¿Cuál es la diferencia entre una cefalea tensional y una migraña?

Las cefaleas tensionales y las migrañas son dos tipos de cefaleas primarias. Las cefaleas tensionales suelen presentar un dolor sordo y constante en ambos lados de la cabeza, como una banda apretada alrededor de la cabeza. Suelen ser provocadas por el estrés y la ansiedad, y pueden durar de 30 minutos a una semana. Por otro lado, las migrañas son ataques de cefaleas que pueden durar de 4 a 72 horas. El dolor de las migrañas suele ser pulsátil, generalmente se localiza en un solo lado de la cabeza, y puede ser de moderado a severo. Las migrañas pueden ser precedidas o acompañadas por otros síntomas, como náuseas, vómitos, y sensibilidad a la luz, el sonido y los olores.

Tipos de cefaleas

Los dolores de cabeza tienen múltiples orígenes, dependiendo de la persona, y se enfocan en diferentes zonas de la cabeza y la cara. Existen aproximadamente 150 tipos de cefaleas, que se concentran en 2 grupos principales. Veamos las tres más frecuentes de las primarias.

• Migraña o jaqueca. Las mujeres son las más propensas a sufrir de migraña debido a la acción de las hormonas. Es un dolor punzante localizado, que puede durar horas o incluso días. Suelen ser recurrentes y, en ocasiones, generan náuseas. 
• Cefalea tensional. Esta cefalea se produce menos de 15 días al mes y normalmente suele durar unas horas. Es más frecuente en mujeres y suele ser generada por el estrés o problemas osteomusculares del cuello. Se describe como una banda de presión alrededor de la cabeza.
• Cefalea en brotes. Es bastante rara y afecta a los hombres mucho más que a las mujeres. Se caracteriza por episodios breves pero muy dolorosos. Tiene síntomas como inflamación, enrojecimiento y lagrimeo de un ojo. Puede presentarse varias veces en un día.

De las secundarias, la más común es la cefalea de rebote. Se llama así porque es producida por el consumo excesivo de medicamentos para combatir la cefalea. Es opresiva y persistente.

Sea cual sea el dolor de cabeza que experimentemos, es necesario prestar atención a la duración y la intensidad del dolor y, si son muy frecuentes, se debe consultar al médico para descartar complicaciones.

Síntomas de la cefalea

Los síntomas dependen del tipo de cefalea que se presente. Entre los síntomas generales más comunes están los siguientes.

• Dolor punzante. Puede ser en toda la cabeza, o solo una parte de ella.
• Sensación de opresión. Esta suele ser localizada, por lo general, en el cuello.
• Mareos y náuseas. Forman parte de las migrañas.
• Visión borrosa. Esto puede ser cada vez más intenso, de acuerdo a la duración del dolor de cabeza.
• Malestar general. Incluye fiebre, inflamación o enrojecimiento en los ojos y párpados, congestión nasal y cansancio.

Los síntomas varían mucho en cada persona, y dependen de qué tan intenso sea el dolor o la condición de la zona afectada.

¿Cómo se diagnostica la cefalea?

Para el diagnóstico, el médico interroga al paciente para dar con el origen del dolor. Se enfoca en buscar el punto de dolor, duración y frecuencia. Si no es común o no se alivia con los medicamentos convencionales, puede ser necesario efectuar pruebas por imágenes. 

La tomografía computarizada y la resonancia magnética permiten ver las terminaciones nerviosas envueltas, la zona del cerebro afectada y cualquier presencia de problemas neurológicos que pueden ser la causa.

La mayoría de los pacientes con dolor de cabeza se tratan ellos mismos, pero no es lo recomendable, debido a que a veces no se tiene el conocimiento necesario sobre los diferentes tipos de cefalea, sus posibles causas y el mejor método a seguir. 

A pesar de que puede ser crónica, un tratamiento adecuado puede facilitar el hecho de vivir con ella. La OMS comprende la carga que impone la cefalea a nivel mundial, también reconoce que muy pocas veces los pacientes cuentan con la asistencia correcta. Por esta razón, participan en campañas contra la cefalea para incentivar la concientización.

Tratamiento para la cefalea

Para tratarla de manera eficiente, se necesita tener conocimiento de qué tipo se presenta en cada caso y cuál es su origen. Existen múltiples medicamentos que pueden ser eficaces para tratar este padecimiento. Dependiendo de la intensidad del dolor, el médico determinará el fármaco ideal, así como la duración y frecuencia del tratamiento. Entre los más sugeridos se encuentran los siguientes.

• Analgésicos. Ayudan a disminuir y aliviar el dolor. Cada medicamento tiene sus ventajas y desventajas. Además, tomar analgésicos de manera desmedida puede causar un efecto de rebote e incrementar el dolor.
• Antieméticos. Están diseñados para disminuir la sensación de náuseas y, por ende, los vómitos. A veces son necesarios cuando se presentan dolores muy fuertes.
• Antimigrañosos. Estos medicamentos alivian el dolor y la inflamación. Están especialmente dirigidos para tratar los dolores de cabeza. Sin embargo, también pueden ser usados para conseguir alivio de otras afecciones.

Si la causa del dolor de cabeza son alteraciones nerviosas, como el estrés, no se recomienda utilizar fármacos. Y si se debe a problemas visuales o cualquier otra patología, lo mejor es buscar tratamiento que ayude a eliminar el origen del problema. Automedicarse con analgésicos puede hacer que el dolor persista, porque no se está tratando la fuente del dolor.

En todo caso, lo mejor es consultar a un profesional de la salud, quien determinará tanto la razón del problema, como la mejor solución disponible. De esta manera, se protege la salud y se reduce la cefalea.

Bibliografía

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