Fístula anal: Qué es, causas, síntomas y tratamiento

Actualizado el día 13 de marzo de 2024 por Alfredo Carpintero Angulo

El cuerpo humano cuenta con muchas conexiones entre diferentes órganos. Esto permite el funcionamiento adecuado del mismo. No obstante, en ocasiones, se pueden presentar conexiones anormales, las cuales afectan considerablemente la salud. A este padecimiento se le suele llamar fístula.

En este artículo veremos de qué se trata la fístula anal, como puede diagnosticarse, así como el mejor tratamiento ante su presencia.

¿Qué es una fístula anal?

Se denomina fístula a la conexión que existe entre dos partes del cuerpo, las cuales no deberían estar unidas. Esto puede ocurrir de diversas maneras. Por ejemplo, una conexión entre la piel y las vías biliares, la garganta y el cuello, las arterias y los pulmones, el ombligo y los intestinos, etc.

Dentro de las causas que llevan a padecer fístulas encontramos las lesiones sufridas en cualquier momento de la vida, las cuales dejan entre sus daños esta conexión anormal. También es posible que se padezca de ella debido a una intervención quirúrgica. Cuando una persona sufre infecciones, especialmente cuando son frecuentes, o de hinchazón, también puede aparecer una fístula anal en el organismo.

Tipos de fístulas anales

Debido a sus características, se pueden dividir las fístulas en 4 grandes grupos. Dependiendo de su clase, se puede señalar un tratamiento diferente.

• Ciegas. Son aquellas que poseen una sola abertura, pero siempre afectan a dos órganos. Este último punto es esencial para incluirla en este grupo.
• Completas. A diferencia de las ciegas, poseen dos aberturas, dentro y fuera del cuerpo. Herraduras. Se refiere a su forma y recorrido, siendo estas las ubicadas en la zona del ano, uniéndose a la piel.
• Incompletas. Hay algunas fístulas anales que se inician en la piel, pero cuyo recorrido no culmina en ningún otro órgano. Aunque existe cierta polémica al respecto, se le considera también como parte de este problema de salud, aunque no esté terminada o completa.

Ante la presencia de cualquiera de ellas, es necesario visitar a un médico experto, quien determinará la clase de fístula, así como el mejor tratamiento a seguir.

Síntomas de una fístula anal

La fístula anal puede causar diversos síntomas, además de la unión de los órganos en el organismo. Estos son destacados por la Biblioteca Nacional de Medicina.

• Orificio en la piel. Es otro de los factores que debe estar presente para considerar el problema como una fístula.
• Enrojecimiento o inflamación. Debido a esta anormalidad en el cuerpo, suele haber un color rojo, además de hinchazón, especialmente en la parte externa del organismo.
• Dolor. De igual manera, se puede tener mucho dolor en la zona afectada. Por ejemplo, si involucra el ano, este se puede intensificar cuando la persona se sienta o al expulsar las heces.
• Malestar general. Destaca en este cuadro la fiebre, la cual puede ser de alta intensidad y presentarse por periodos largos.
• Infección. Los síntomas propios de la infección, incluyen presencia de secreción y pus.

Dependiendo de la condición de salud de cada persona, así como los padecimientos sufridos en el pasado, pueden hacerla más propensa a tener una fístula.

Tratamiento para la fístula

El médico debe realizar una revisión completa del paciente con la finalidad de determinar si hay una fístula anal y cuál es su clase. Una vez se confirme el padecimiento, se puede indicar el tratamiento a seguir. Estas son algunas de las opciones disponibles para disminuir o eliminar por completo las fístulas.

Intervenciones quirúrgicas

Es el tratamiento más recomendado debido a que permite la eliminación del problema desde la raíz. Existen diversos métodos, y la elección dependerá de la gravedad de la fístula y su localización.

• Fistulotomía. Se refiere al proceso donde se llega hasta la parte interna de la fístula anal, retirando parte de ella y sellando la abertura. En los casos más graves, se tiene que eliminar tanto la zona que hace contacto con el otro órgano y parte del túnel.
• Ligadura. Es un proceso mucho más complejo, pero que evita que se elimine parte del túnel que se ha creado. Se coloca látex y, tras algunos días, se retira. Ese periodo de tiempo permite que se extienda, logrando que sea más sencillo sellarlo.

Siempre debe ser el médico quien decida si se usará alguno de estos métodos, u otro disponible, porque es él quien conoce mejor los riesgos y beneficios de cada proceso.

Uso de sedal

Para este tratamiento, se coloca un sedal para drenar el contenido de la fístula. Esto permite que se cierre por completo y, tras un periodo corto, se cicatrice en su totalidad. Solo se puede utilizar en los casos donde el problema aún es leve o moderado.

Fármacos

El uso de medicamentos puede tener dos objetivos. Primero, en los pacientes con fístula originada por la enfermedad de Crohn, se suele administrar tanto para eliminar ese padecimiento como su efecto. De esa manera, se consigue acabar con la fístula anal por completo.

Por otra parte, se puede indicar el empleo de medicamentos con la finalidad de tratar los síntomas que la fístula produce. Si ese es el caso, solamente será prescrito por el médico cuando el problema sea muy leve y no requiera intervención quirúrgica.

Métodos más invasivos

Dependiendo de la condición de la enfermedad, el profesional de la salud podría determinar que se requiere un tratamiento aún más intenso o invasivo. Esto suele ocurrir en pacientes con fístula anal. Para ello, se pueden seguir dos métodos.

• Ostomía. Se refiere a la abertura que se crea en el abdomen. Ahora, se coloca una bolsa, la cual ayuda a recolectar las heces en ella. Debido a que la zona anal queda sin uso durante este periodo, la fístula puede ceder considerablemente, e incluso desaparecer por completo.
• Colgajo. También es posible utilizar tejido del paciente de otras partes del cuerpo y rellenar el túnel. Así se elimina el problema.

Aunque es cierto que la fístula anal puede causar muchos malestares y problemas, también hay diferentes maneras de tratarlo, logrando que se obtenga la mejor solución.

Bibliografía

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